Reseña de Century: La Ruta de las Especias

Century es un juego de Emerson Matsuuchi para la editorial de reciente creación Plan B Games. Es el primero de una serie de títulos autojugables con diferentes ambientaciones. En este caso, los jugadores se convierten en mercaderes comerciando con especias en busca de fortuna.

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Las mecánicas son muy sencillas, en su turno cada jugador tiene cuatro opciones:

  • Jugar una carta de la mano. Las especias tienen diferente valor, de tal modo que con las cartas de mercader podrás adquirir nuevas especias, mejorar las que ya tienes o intercambiar unas por otras.
  • Adquirir una carta de Mercader de un stock de seis cartas. La carta de la izquierda sale gratis, si quieres alguna más a la derecha tendrás que depositar una especia en cada carta hasta llegar a la deseada.
  • Recoger las cartas ya jugadas para volver a tenerlas disponibles.
  • Reclamar una carta de puntuación de un stock de cinco cartas. Para ello tendrás que pagar la combinación de especias requeridas. Si compras la que está más a la izquierda adquirirás además una moneda de oro y si es la segunda por la izquierda una de plata.

En el momento en el que un jugador adquiera un determinado número de cartas de puntuación (que depende del número de jugadores) la partida concluye. A las cartas de puntuación se le suman las monedas y un punto por cada especia (salvo las de menor valor). El jugador con más puntos será el ganador.

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Desde el punto de vista de los componentes el juego es impecable. Cartas y cubos de gran tamaño, cubiletes para organizar las especias, no falta un detalle. Como jugón de culo duro que soy, os diría que está sobreproducido. A mí me hubiera gustado una producción como lo que es, un juego de cartas. De esta manera costaría y ocuparía la mitad, pero daría las mismas sensaciones al jugarlo. Sin embargo este juego no está hecho para jugones amargados como yo, su público es más ocasional.

En cuanto a las sensaciones ya habréis oído o leido que se parece al Splendor. Estoy de acuerdo, la base del juego es la misma. Sin embargo Century da una vuelta de tuerca muy acertada. Si en el Splendor adquirías las joyas sin más, aquí tienes que manejar una mecánica de construcción de mazo para ir adquiriendo y perfeccionando las especias. Es cierto que las sensaciones son las mismas, pero este juego es más exigente.

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¿Que sensaciones son esas? A mí personalmente me parece un solitario multijugador. Una carrera por ver quien completa antes sus combinaciones para adquirir cartas. Solo levantas la cabeza para ver si algún contrincante puede estar preparándose para adquirir la misma carta que quieres tú.

En definitiva, Century es un juego ligero y fácil de explicar, que se queda un poco corto para los jugones pero que es un juego ideal para iniciación. Es un juego amable y sin complicaciones para entretener a toda la familia.

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